Principales causas de bulto en la nuca

Principales causas de bulto en la nuca

Un bulto en la nuca puede ser señal de que algún ganglio linfático está aumentando. Esto puede ocurrir debido a infecciones o inflamaciones cercanas al cuello, o enfermedades como mononucleosis infecciosa (“enfermedad del beso”), tuberculosis ganglionar, linfoma, enfermedad de Kikuchi o incluso un tumor maligno en la cabeza o en el cuello.

Cuando el bulto es cáncer (por ejemplo, linfoma), el nódulo es notorio y se ve endurecido, pudiendo estar adherido a estructuras más profundas.

Sin embargo, un bulto en la nuca también puede ser un lipoma, que no es más que un tumor benigno formado por grasa. En estos casos, el bulto suele tener una consistencia más firme que la de un ganglio linfático. Por tratarse de algo benigno, el lipoma no necesita ser retirado, excepto por razones estéticas.

El bulto en la nuca también puede ser un remanente el periodo embrionario. La lesión benigna es retirada por motivos estéticos o cuando hay inflamaciones recurrentes en la zona.

Las contracturas de los músculos posteriores del cuello también pueden resultar en bultos en la nuca. En estos casos, el tratamiento puede realizarse por medio de relajantes musculares y fisioterapia.

Si el bulto en la nuca permanece por más de dos semanas, es importante consultar al médico general para una mejor evaluación.